PASTEL DE POLENTA
La polenta es una harina de maíz de sabor dulce muy fácil de utilizar en la cocina. Esta receta de verano, es un pastel muy práctico y fácil de elaborar, que se puede comer frío, para llevar de excursión, al trabajo… Para un almuerzo, una cena… se puede comer tal cual el pastel frío, en trozos a la plancha con una gotita de aceite o rebozado en pan rallado. Es ideal y delicioso.
Ingredientes para 4 personas: 1 vaso de polenta integral, 4 vasos de agua fría o caldo de verdura, 1 vaso de champiñones cortados pequeñitos, 1 calabacín pequeño cortado en trozos pequeños, aceite de oliva virgen, sal marina sin refinar, nuez moscada al gusto.
Elaboración: en una sartén antiadherente echar unas cucharadas de aceite y sofreír el calabacín y los champiñones a fuego medio. Salar la verdura. Después añadir la taza de polenta y las 4 tazas de agua, sal y nuez moscada. Poner a fuego alto y cuando empiece a hervir bajar el fuego al mínimo y tapar. Mezclar bien las verduras. Cocer durante 15-20 minutos. Quedará una masa como de croquetas. Ir removiendo la masa durante la cocción. Cuando esté cocido, verter a un recipiente de cristal y dejar enfriar.
Al final de la cocción puede agregarse: perejil con ajo picadito, o penillos en rodajas, o aceitunas picaditas o almendras o avellanas troceadas o un toque de pimienta negra…